Sociología - Jugar de veras

Como toda nena, siempre quise ser como las muñecas Barbie. Simbolizan el prototipo de mujer que se espera en la sociedad: con las medidas soñadas, el pelo lacio y brillante, la ropa última moda y la cara perfecta.

También jugaba mucho con la cocinita. Los juegos de cocina les inculcan a las niñas desde muy chicas que se espera que al crecer sean amas de casa y sepan cocinar para sus familias.

Era muy común que fuera al jardín toda maquillada. El que las nenas usen esmaltes, sombra de ojos, lapices de labio, brillo y rubor porque de alguna forma les enseña como la sociedad espera que se vean.

Uno de los juguetes que más usaba y con el cual siempre salia a pasear era un bebote. Las nenas ven que gran parte de las mujeres adultas en su sociedad tienen bebés y quieren jugar a cuidarlos y a ser responsables con ellos.

Muchas veces en el jardín jugaba con ladrillos de plástico. Me enseñó, con ayuda de un poco de imaginación, a esforzarme para construir un refugio para mi y bebés.

En mi habitación tenía un pequeño pizarrón con tizas de colores. Con él practicaba para convertirme en lo que la mayor parte de las niñas pequeñas quieren ser cuando crezcan, maestra jardinera.

Los animales de peluche me enseñaron a no tenerle miedo a los animales y que a veces son la mejor compañía.

De chica amaba los libros. No sólo me gustaba leerlos, sino que también jugaba a que iba a trabajar y salir a pasear con uno bajo el brazo me hacía sentir mayor. Refleja claramente que la sociedad espera qye la gente sea culta y trabajadora para ser exitosa

También me gustaba mucho que me regalaran libretas y cuadernos para escribir. Jugaba a ser doctora, secretaria o vendedora para decidir en qué querría convertirme cuando creciera

Por úlltimo, cuando me dieron mi primer palo de hockey aprendí a trabajar en equipo, a resolver situaciones rapidamente y a esforzarme para conseguir lo que quiero. Los juegos que jugamos desde niños nos dejan valores que nos servirán cuando seamos mayores.

Muerte de Romeo y Julieta

Esta es una escena de la película "Romeo y Julieta" protagonizada por Leonardo Di Caprio y Claire Danes en la que se muestra la forma en la que ambos pierden la vida. Podemos ver que la escena experimenta notables cambios. A diferencia de la película, en el libro Romeo y Julieta no tienen la posibilidad de verse o hablarse antes de morir. También, debido a los avances tecnológicos, se moderniza la forma en que muere Julieta. En la época en que se escribió el libro no existían las armas de fuego, por lo tanto Julieta se suicida con el puñal de su amado. Por último, a diferencia de esta escena en que los protagonistas se encuentran solos al momento de morir, en el libro el Fray Lorenzo y Baltasar presencian la muerte de Romeo y Julieta.

Reseña

 

"Romeo y Julieta" es una obra de teatro escrita por William Shakespeare durante el siglo XVI. Se considera a esta historia un clásico de la literatura y el tema predominante es la tragedia, más específicamente el amor trágico. La obra se trata de dos jóvenes que comparten un amor prohibido debido a las rivalidades entre ambas familias. No obstante, esto no es un impedimento para ellos ya que logran contraer matrimonio. El desenlace es inesperado, ya que aquel amor desmesurado y sublime termina con el suicidio de ambos personajes. La obra también especula con el concepto de amor verdadero y eterno y lo representa como algo que perdura más allá de la vida y por el resto de la eternidad, la aparición de una pasión tan grande que puede llevar a quitarse la vida con tal de poder permanecer junto a la persona que se ama en algún lugar desconocido. El final, al ser impredecible, causa un impacto en el lector, invitándolo a reflexionar sobre estas cuestiones y sacar sus conclusiones.

A lo largo del tiempo...

Romeo y julieta

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Las diversas imágenes muestran a la mítica pareja de diferentes formas. Esto se debe a que a lo largo del tiempo, la concepción de la historia se fue modificando, adaptando y "modernizando". La cuestión que en su momento se calificaba como osada y desafiante, el tener una relación amorosa sin el consentimiento paterno, fue perdiendo esa connotación. A medida que pasó el tiempo, este concepto de amor prohibido comenzó a considerarse más una aventura que un pecado desaprobado por la sociedad, y en consecuencia, fue representado como algo positivo, romántico y aceptado por la gente.

William Shakespeare (Stratford on Avon, Reino Unido, 1564-1616)fue un escritor, dramaturgo y actor inglés. Su familia había sufrido persecuciones religiosas derivadas de su confesión católica. Poco o nada se sabe de la niñez y adolescencia del escritor. Estudio en "Grammar School" de su localidad natal. Debió abandonar sus estudios a temprana edad ya que su padre atravesaba dificultades económicas y políticas. Antes de ser conocido como escritor, se lo conocía como actor de teatro, especialmente de obras dramáticas. Fue su actividad como dramaturgo lo que dio fama a Shakespeare en la época. Su obra, en total catorce comedias, diez tragedias y diez dramas históricos, es un exquisito compendio de los sentimientos, el dolor y las ambiciones del alma humana. Entre sus obras más famosas, además de Romeo y Julieta se encuentran Macbeth, Hamlet y Sueño de una Noche de Verano

En mi opinión, "Romeo y Julieta" se encuentra entre las obras más famosas y exitosas de Shakespeare debido a los temas que trata. Es una historia con un final atípico para la sociedad de aquel momento, una historia que refiere al "verdadero amor" y al "amor eterno" constantemente y cuyo final resulta una tragedia. Ésta contraposición al "final feliz" ha transformado a "Romeo y Julieta" en una obra teatral escandalosa y destacada

Matrimonios del siglo XVII

En el primer acto de Romeo y Julieta, uno de los aspectos que más me llamó la atención aparece en la tercera escena donde Julieta, la Nodriza y Lady Capuleto llevan a cabo una conversación en los momentos previos al comienzo de la fiesta de los Capuleto. La Nodriza menciona casualmente el matrimonio y Lady Capuleto le dice que muchas muchachas en Verona ya estan casadas y tenían hijos. Objeta también que ella, a su edad, no sólo estaba casada, sino tambien ya era madre. Julieta le contesta que ella jamás había pensado en el matrimonio aún. Lady Capuleto le dice que hay un jóven hidalgo llamado Paris que la pretende y le pide que durante la fiesta se fije en el atentamente, teniendo presente la posibilidad de casarse con el en un futuro cercano. Finalmente le pregunta si ella accedería a amarlo y Julieta contesta aceptando la propuesta, pero no con mucho entusiasmo.

Este aspecto de los matrimonios a tan corta edad y arreglados por las familias era algo muy común en la Inglaterra del siglo XVII. Desde aproximadamente el año 1730, la ley inglesa estableció que los hombres podían contraer matrimonio a partir de los 14 años y las mujeres a partir de los 12, sólo con el consentimiento de sus padres. En aquel momento se creía que el amor debía surgir luego del matrimonio.

El objeto del matrimonio arreglado era el de elegir el pretendiente mas adecuado para el hijo o hija y asegurarle un futuro próspero y feliz. Normalmente, los padres buscaban pretendiente de alta clase social que les brindara la satisfacción de saber que su hijo/a tendrá un buen futuro cuando ya no dependa de sus padres. Antiguamente, la independencia de los hijos aparecía mucho antes que ahora. La mayoría de los adolescentes en Inglaterra durante el siglo XVII ya tenían su propia familia y vivían sin sus padres antes de los 18 años. Se optaba por casar a sus hijos mientras eran jóvenes para que el matrimonio aprendiera a convivir con las diferencias de cada uno y que las vieran como algo normal y no un inconveniente. Esto evitaría el posible surgimiento de un divorcio. La práctica de los matrimonios arreglados y a corta edad se sigue realizando en países como Pakistan, Bangladesh, Sri Lanka y la India, pero ya no son tan comunes como antes. En Inglaterra, sin embargo, se cree que la idea de arreglar los matrimonios sigue en pie, pero nadie tiene la certeza. Sin embargo, ya no sucede con adolescentes jóvenes sino con adultos que poseen, más que nada, un título de la nobleza.